martes, 9 de diciembre de 2008

Carta de un amor desesperado.


Los luceros se apagan
cuando el viento sopla fuerte en tu ausencia,
ya nada es igual.
La soledad de sentir en la noche el cantar de un grillo
me siento sola , olvidada, abandonada,
me hace falta calor,
tú calor.

Por más que trate de olvidarte no lo consigo,
sigue vivo tu recuerdo en mi mente y corazón
ya no aguanto.. no aguanto las ganas de besarte,
abrazarte cuantas veces yo quiera..
No sé si pueda volver a enamorarme,
el profundo vacío que dejaste,
es muy difícil de llenar solo con lágrimas.

Sin embargo, no estás solo,
siempre hay una sombra rodeándote y deseándote,
y cuando al fin logro alejarla...
me rechazas.

Hay tantas cosas que quisiera decirte
pero ya no estoy junto a ti.. Es hora de un despedida
del adiós para siempre
no quiero mas lamentos
no quiero mas sollozos
no más tristeza... ¡¡Ya no!!

PD: No quiero llorar más por ti, no quiero odiarte
pero tampoco puedo seguir amándote.. Adiós.


No hay comentarios: